El boldo, conocido científicamente como Peumus boldus, es una planta originaria de Chile, ampliamente valorada en la medicina natural por sus propiedades hepáticas, digestivas y depurativas. Utilizado desde tiempos precolombinos por los pueblos indígenas andinos, el boldo es hoy un remedio natural habitual para tratar trastornos del hígado, la vesícula biliar y el aparato digestivo.
El boldo contiene principios activos como boldina, aceites esenciales (eucaliptol) y flavonoides que le otorgan sus efectos terapéuticos más destacados:
Las hojas de boldo son la parte utilizada con fines terapéuticos. Puede administrarse de diversas maneras:
El boldo debe utilizarse en dosis moderadas y por periodos limitados. Está contraindicado durante el embarazo, lactancia, obstrucción de vías biliares y en personas con insuficiencia hepática severa. El uso de aceites esenciales de boldo debe evitarse por su posible toxicidad.
El boldo es una planta medicinal de gran valor terapéutico para mejorar la salud hepática, digestiva y biliar. Su uso tradicional y moderno lo convierten en una herramienta natural eficaz para quienes buscan cuidar su sistema digestivo y depurar el organismo de forma segura y natural.